“Disputa de Marcas: La Importancia de la Distinción y Protección en el Mercado”
En el competitivo mundo del comercio, las marcas juegan un papel fundamental en la identificación y diferenciación de productos y servicios. Sin embargo, cuando dos marcas parecen ser similares o confundibles, pueden surgir disputas legales que buscan proteger la reputación y el reconocimiento de cada empresa involucrada. Un ejemplo reciente de esto es la oposición presentada por Dolce Bocatto SAS ante la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) por el registro de una marca similar. El argumento presentado por el opositor se basa en que la marca solicitada es confundible con la marca notoria “Bocatto”, y que un tercero intentando aprovecharse injustamente de su reputación y reconocimiento debería ser motivo suficiente para negar el registro. Uno de los puntos destacados por el opositor es que la marca en disputa forma parte de una familia de marcas, lo que le otorga una protección especial ante la SIC. Además, afirma que la marca “Bocatto” es notoriamente conocida, lo que refuerza aún más su protección debido a su prolongado periodo de uso en el mercado y la reputación que ha adquirido entre los consumidores. Por su parte, Dolce Bocatto SAS contra argumentó que aunque la marca opositora cuenta con una protección especial, esta se centra en la expresión “Bocatto”, cuya traducción al español es “bocado”, término común y popular en diversos escenarios comerciales. Según la empresa, los consumidores no asociarían automáticamente la palabra con su producto específico. Tras un minucioso análisis del caso, la SIC concluyó que los signos enfrentados son en efecto similarmente confundibles. El solicitante de la nueva marca reproduce la parte distintiva de la marca opositora, lo que podría generar confusión entre los consumidores. Por ende, la SIC optó por negar el registro de la nueva marca. Esta resolución destaca la importancia de la distinción y protección de las marcas en el mercado. Para las empresas, el registro de una marca se convierte en una estrategia clave para asegurar su identidad, reputación y reconocimiento entre los consumidores. A su vez, es fundamental que los solicitantes investiguen cuidadosamente antes de registrar una nueva marca, evitando posibles conflictos con marcas preexistentes y respetando los derechos de propiedad intelectual de otras compañías. En el competitivo mundo comercial, la imagen de una marca puede ser uno de los activos más valiosos para una empresa, por lo que protegerla y asegurarse de que sea única e identificable es una prioridad. La decisión de la SIC en este caso es un recordatorio para todas las empresas de la importancia de considerar la originalidad y distintividad al crear y registrar nuevas marcas, y así evitar enfrentar disputas y conflictos en el futuro.
“Nueva Ley de Protección al Derecho a la Intimidad: ¡Adiós a las Llamadas Inoportunas!”
El Gobierno Nacional de Colombia ha dado un paso significativo para proteger el derecho a la intimidad de los consumidores con la sanción de la Ley 2300 el 10 de julio de 2023. Esta nueva legislación, también conocida como “Dejen de Fregar”, tiene como objetivo establecer medidas que prohíban a las entidades financieras y comerciales realizar llamadas fuera de los horarios hábiles, evitando así las molestias y el acoso que muchos colombianos han experimentado en el pasado. El representante del Partido Conservador y autor de esta iniciativa, Juan Carlos Wills, expresó su satisfacción por la aprobación de la ley, destacando que es una gran noticia para todos los ciudadanos. “Una ley que le va a prohibir y va a meter en cintura a las entidades financieras y comerciales para que no estén llamando y molestando a los colombianos en horarios no hábiles”, afirmó el congresista. La Ley “Dejen de Fregar” reglamenta los canales y horarios en los que los bancos y otras instituciones financieras pueden contactar a los consumidores para fines de cobranza. Según el articulado, estas tareas de cobranza solo pueden llevarse a cabo de lunes a viernes, entre las 7 de la mañana y las 7 de la noche, y los sábados de 8 de la mañana a 3 de la tarde. Esto significa que los domingos y festivos quedan totalmente excluidos, y se prohíbe cualquier visita al domicilio o lugar de trabajo con el propósito de efectuar cobros pendientes. La nueva ley también delega al Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MINTIC) y a la Comisión de Regulación de Comunicaciones la coordinación del Registro de Números Excluidos. En este registro, los consumidores que no deseen recibir llamadas, mensajes, correos o cualquier otro tipo de contacto con fines comerciales o publicitarios pueden inscribirse para proteger su privacidad. Además de establecer horarios específicos para las comunicaciones de cobranza, la ley limita la cantidad de contactos que pueden realizar las entidades financieras con los consumidores. Cada entidad solo podrá hacer un máximo de dos contactos por semana, independientemente del canal utilizado. Si la entidad envía un mensaje de texto y luego hace una llamada, se habrán utilizado las dos comunicaciones permitidas para esa semana. Para asegurar el cumplimiento de la ley, las Superintendencias Financiera y de Industria y Comercio desempeñarán un papel clave al supervisar y sancionar a aquellas empresas que no cumplan con lo establecido en la legislación. Los usuarios también pueden presentar quejas ante estas superintendencias, lo que permitirá investigar y aplicar sanciones económicas a las empresas en caso de incumplimiento. La Ley 2300 promete ser un alivio para aquellos consumidores que han sentido el acoso de las llamadas comerciales en momentos inoportunos. Con esta nueva legislación, las personas podrán disfrutar de su tiempo libre y descanso sin preocuparse de ser contactadas constantemente. El abuso de la confianza y la permisividad de la ley, que ha llevado a algunas personas a recibir hasta diez llamadas simultáneas, quedará en el pasado. En resumen, la Ley “Dejen de Fregar” representa un importante avance en la protección del derecho a la intimidad de los consumidores colombianos. Con horarios definidos para las tareas de cobranza y restricciones en la cantidad de comunicaciones permitidas, esta legislación garantiza un mayor respeto hacia la privacidad de los ciudadanos y establece mecanismos para hacer cumplir sus disposiciones.